vivir del cuenco es un aperitivo cerámico;
un proyecto creativo que juega con la idea, a nuestro entender equivocada, de que hacer lo que te gusta no debe remunerarse;
es una invitación a que sientas el placer que se deriva del uso cotidiano de objetos únicos en tu mesa;
es una propuesta de consumo consciente y de proximidad, sin intermediarios, directamente de nuestras manos artesanas a las tuyas;
y, tal vez, sea un sueño, ¿quién sabe? quizás un día podamos vivir del cuenco.